A pocas horas de que la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, pintara un panorama muy optimista del estado económico y laboral de la Empresa Pública Nacional Textil (Enatex), los trabajadores declararon paro indefinido por cuatro meses de sueldos impagos y exigieron reunirse con el presidente Evo Morales para mostrarle la realidad en que viven los más de 1.600 trabajadores y pedir apoyo financiero.
Desconociendo al sindicato e instaurando otro que los represente, los textileros aprobaron en una asamblea el paro total de actividades hasta que el Gobierno les pague sus sueldos, cancele bonos de producción, los subsidios de lactancia, restitución del seguro de salud, pago a proveedores, a la concesionaria de alimentos, entre otras demandas. Ayer, la mayoría salió al patio de la empresa y protestó airadamente.
“Estamos cansados de los engaños. Ahora, la planta de hilo y la de telas en El Alto están paralizadas. La planta central y administrativos de igual forma. Estamos en huelga indefinida hasta que alguien nos dé una solución. La actual administración está peor que antes”, declaró Raúl Bautista, miembro de la comisión de huelga, quien esperó en vano ayer reunirse con las autoridades del Gobierno.
El trabajador Álvaro Corazón, junto a decenas de colegas que cortaban la calle aledaña de la central de Enatex, en la zona de Villa Fátima, señaló que la gerenta Julia Aparicio y la ministra Morales “quieren tapar el sol con un dedo diciendo que estamos bien, pero no es así”.
El nuevo secretario general, Gerónimo Cori, lamentó que solo obtienen promesas por parte de la gerenta.
El lunes, la ministra Morales afirmó que la textilera tiene $us 11 millones por cobrar y debe $us 3,5 millones en salarios, por lo que negó su quiebra. Aseguró que para 2015 tienen asegurados los mercados brasileño, argentino y cubano. Los trabajadores la desmintieron.
La gerenta de Enatex manifestó la anterior semana, que el patrimonio de la empresa creció y que en la actualidad tienen $us 94 millones, lo que mostraba su estabilidad. “Desde 2010 los índices muestran que crecimos un 280% en exportaciones. En ventas, un 198%. En cantidad de prendas, un 226%. Todo muestra que Enatex está bien. Lo que ahora no tenemos es el dinero en nuestras arcas”, explicó
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