Los trabajadores de la Empresa Pública Nacional Textil (Enatex) no recibieron ayer, como estaba previsto, el avalúo tanto de la infraestructura como de la maquinaria de ese complejo textilero para la compra definitiva.
"Ya planteamos que nos remitan el informe del avalúo, pero nos dijeron que mañana (hoy) nos estarán comunicando. Creo que nos harán llegar una nota”, informó el dirigente de los empleados textiles, Pedro Cruz.
El secretario general del Sindicato Enatex, Edwin Quispe, declaró, en una anterior oportunidad, que la tarea fue encomendada a una empresa peruana. Con el dinero de la venta de la textilera, que pertenece al empresario Marcos Iberkleid, se pagarán los beneficios sociales de los trabajadores.
El grupo textilero tenía cinco unidades -Universaltex, Matex, Mex, Hilasa y la tienda Batt- y para evitar la quiebra por la pérdida de mercados en EEUU fueron transferidas en alquiler con opción de compra al Gobierno, que fundó la estatal Enatex.
El Ejecutivo se comprometió a adquirir los activos y con ese dinero Ametex debía pagar los beneficios sociales de 1.400 trabajadores y 200 administrativos.
A las administradoras de fondos de pensiones (AFP ) se les debe 17 millones de dólares, según confirmó en su momento la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales.
La AFP Futuro, mediante una carta, pidió al Gobierno que concluya el proceso de compra porque así recuperará los recursos que invirtió en bonos de la empresa textilera.
La Unidad de Comunicación del Ministerio de Desarrollo Productivo no dio detalles de una posible respuesta.
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