Absuelven a un acusado de peculado en Insumos Bolivia

El Tribunal Segundo en lo penal de la Capital, luego de realizar la valoración de toda la prueba presentada en juicio oral, público y contradictorio,

dictó una sentencia absolutoria a favor de una persona que fue acusada por el delito de peculado. El hecho aparentemente se hubiese suscitado en el mes de noviembre del año 2010 en la institución Insumos Bolivia.
El abogado del acusado, Milver Aban, informó que durante el periodo de juicio el Ministerio Público no logró recabar la prueba suficiente e individualizar cual fue la participación del procesado para generar dentro del Tribunal la convicción de que fue el autor del hecho.

Dinero
“El caso hubiese sucedido en el sentido de que mi cliente hubiese recibido dinero del Estado Nacional; pero, conforme presentamos pruebas, los contratos trimestrales establecen que él era encargado de almacenes y no otro cargo más alto donde se recibe y se cuenta con dinero”, dijo.
Indicó que demostraron a través de los contratos que firmó con la institución que como encargado de almacenes no recibió ni un centavo por parte de los clientes, quienes compraron fertilizantes de dicha institución.
“Todos los testigos que se presentaron en el juicio indicaron que, para adquirir los fertilizantes, ellos tenían que ir a una entidad financiera a hacer el depósito y con la papeleta que le entregaban se dirigían a Insumos Bolivia y recogían las cosas”, añadió.
Aban hizo conocer que se actuó mal con su defendido, puesto que antes de llegar a una denuncia ante el Ministerio Público, se debió realizar un proceso por la vía administrativa para definir si hubo o no algún delito.
“En el juicio hemos demostrado, de acuerdo a lo que establece el artículo 363 del Código de Procedimiento Penal, que no había prueba suficiente y el Tribunal emitió una sentencia justa disponiendo una sentencia absolutoria”, mencionó.
Asimismo, amplió que su defendido también fue acusado por el delito de incumplimiento de deberes, hecho que también fue desvirtuado durante el juicio realizado en las pasadas horas.
“Conforme cursa en el cuaderno y la acusación del pliego acusatorio de la parte civil y público, se indica que se hubiese sustraído alrededor de 59 mil bolivianos, dinero que no fue cobrado por mi defendido”, añadió.
El jurista, explicó que el peculado es un delito que comete un servidor público que aprovecha el cargo que desempeña para apropiarse de dinero, de valores o bienes que están bajo su administración.
“Mi defendido no tuvo bienes bajo su administración porque era el encargado de almacenes y, en el caso, el Ministerio Público debió seguir un proceso contra otras personas para encontrar responsabilidad y así ver dónde se fue el dinero denunciado”, manifestó.