En 2013, los gastos de la Empresa Pública Nacional Textil (Enatex) duplicaron a sus ingresos, según el balance de estado de recursos y gastos corrientes reportado al Ministerio de Economía.
Según el documento, los recursos corrientes -incluyen la venta de bienes y servicios, los intereses y otras rentas de la propiedad, las transferencias corrientes e ingresos por clasificar, entre otros-, sumaron 67,4 millones de bolivianos (ver cuadro).
En cambio, los gastos corrientes -gastos de consumo, sueldos y salarios, aportes patronales, beneficios sociales, indemnizaciones, costo de materiales y suministros e impuestos, entre otros- llegaron a más de 123,7 millones de bolivianos.
En 2012 esta partida sólo era de 29,1 millones de bolivianos, es decir, se incrementó en 94,7 millones de bolivianos.
Por ejemplo, en sueldos y salarios, hasta el cierre de gestión en 2013 se adeudaba alrededor de 12,1 millones de bolivianos.
"Hay una pérdida, no hay verdaderamente un manejo corporativo. Creo que les están dando tiempo para demostrar que el funcionamiento será mejor a futuro, pero se necesitará una amplia intervención de recursos; entonces, mientras eso no se dé, continuará con la misma situación”, opinó el analista en economía Alberto Bonadona.
Ante la situación de Enatex, sugirió que se facilite un préstamo, sobre la base de los flujos futuros, con el fin de garantizar que la empresa salga de la franja de "números rojos”.
Durante la pasada gestión, las pérdidas de la Enatex sumaron 61 millones de bolivianos, mientras que en 2012 el resultado negativo fue de 13,8 millones de bolivianos.
Estas cifras revelan que en un año el margen negativo de la estatal aumentó en 340%, según un análisis del balance general de la empresa reportado al Ministerio de Economía y publicado en el Sistema Integrado de Gestión y Modernización Administrativa - SIGMA.
En 2013, las ventas de Enatex llegaron a 66,2 millones de bolivianos y fueron superiores en 316% a las de 2012, cuando sumaron 15,9 millones de bolivianos.
El activo de la empresa textil ascendió a 108,6 millones de bolivianos, el pasivo a 52,6 millones de bolivianos y el patrimonio llegó a 56 millones de bolivianos, revela el mencionado balance.
La gerente general de la textilera pública, Julia Aparicio, aseguró el lunes 10 que las ventas totales de la firma estatal crecieron en 198%, entre 2012 y en lo que va de esta gestión.
Según la ejecutiva, en dos años de vida, como pocas fábricas, Enatex honró los compromisos sociales de sus exdueños e incluso cada trabajador recibió un promedio de 42.000 bolivianos por sus beneficios sociales y se compraron los activos.
La transición fabril
Compra Según las autoridades, el Estado ya es dueño del complejo textil que en principio se alquiló de Marcos Iberkleid, el expropietario de Ametex. Las plantas se compraron por 15 millones de dólares.
Alquiler En julio de 2012, el Gobierno y Ametex (actualmente Enatex) alcanzaron un acuerdo de alquilar por 45.000 dólares por las cuatro plantas de la firma privada a la Empresa Nacional Pública Textil (Enatex).
Mercado Este medio remitió en octubre cuestionarios al Ministerio de Desarrollo Productivo y a la empresa para conocer su opinión sobre el balance. No hubo respuestas.
Fabriles cuestionan la administración
La Federación de Fabriles pidió que el manejo de Enatex esté a cargo de personas con experiencia y relacionadas con la administración de empresas.
"Siempre dijimos que no puede estar un constructor manejando una empresa. Se debe respetar la carrera que una persona estudió. En este caso, debe estar alguien que conozca de administración de empresas”, afirmó el dirigente fabril Vitaliano Mamani.
La petición fue presentada a la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, en una reunión de la semana pasada.
Mamani dijo que la autoridad de Gobierno se comprometió a que "si hay administrativos que den un mal trato a los compañeros habrá ajustes”.
Este encuentro se realizó después de las denuncias de retraso en el pago de los salarios de los trabajadores de la empresa.
La demora se habría producido porque se pagó la liquidación de todos los trabajadores.
"La anterior administración (privada) ya había despedido a 500 trabajadores sin pagarles beneficios sociales. Cuando se hace cargo Enatex no tienen responsabilidad de los despidos anteriores. Pero negociando con el sindicato y los trabajadores se pagó a cerca de 2.500 trabajadores y exempleados de la textilera”, explicó.
Cada uno de ellos, en promedio, recibió 10.000 dólares como liquidación y este pago extraordinario produjo un desbalance en la empresa, dijo. Sin embargo, se comprometieron a regularizar el pago de salarios hasta principios de diciembre, añadió.
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